Xurxo Salgado/Gonzalo Brocos (El Salvador).- Es gente pequeña pero constante. Gente que no dice nunca que no, que quiere tirar para adelante y que piensa que la pesca artesanal tiene futuro en un medio hostil. No hay muchos medios, ni dinero, pero el objetivo es intentar que los más jóvenes hereden el trabajo de sus padres y no busquen un futuro en la emigración.
Benjamin Cepeda y Óscar Ulloa son técnicos formadores del Centro Nacional de Formación Pesquera (Cendepesca) de El Salvador. Son los encargados de diseñar e impartir los cursos de capacitación y formación de los pescadores locales.
Un trabajo que comenzó en 2007 y que ya está dando sus frutos, aunque lentamente. "Fue difícil al principio, pero el mensaje fue captado y, al final, hubo motivación. Ahora valoran y aprecian esta capacitación porque les es útil", comenta Óscar sobre su experiencia con los pescadores.
A lo largo de estos años han impartido cursos a más de 300 personas sobre náutica pesquera, pesca artesanal y modelos de comercialización. Conocimientos que, a su vez, ellos han adquirido de técnicos del Cetmar. Pero, ¿funcionan?, preguntamos. "Si, si... Antes no le interesaban pero, ahora, se ve un cambio muy importante y muy positivo", contesta Benjamín taxativo.
Por eso no ocultan su satisfacción. Dicen que los cusos están dando respuesta a los principales problemas de los pescadores; la conservación del pescado, su comercialización y conocimientos básicos de mecánica, primeros auxilios y supervivencia en el mar.
Luchar contra la emigración
Sin embargo, y a pesar de tesón y empeño en formarlos, son conscientes de la existencia de problemas graves. "Los jóvenes no le ven futuro a la pesca y se van a la ciudad. Es un sector muy vulnerable, pero estamos a tiempo de tratarlo", apunta Óscar al referirse a las alternativas a la pesca artesanal; la acuicultura y el turismo pesquero.
Con todo, no ocultan cierta desazón por el futuro en el sector, sobre todo, si no se continúa con la formación. Y, como en todo proyecto, el principal problema es económico. "Hay interés en continuar con la formación, pero hay problemas de financiación". Un obstáculo que, por el momento, no saben como salvar.
Benjamin Cepeda y Óscar Ulloa son técnicos formadores del Centro Nacional de Formación Pesquera (Cendepesca) de El Salvador. Son los encargados de diseñar e impartir los cursos de capacitación y formación de los pescadores locales.
Un trabajo que comenzó en 2007 y que ya está dando sus frutos, aunque lentamente. "Fue difícil al principio, pero el mensaje fue captado y, al final, hubo motivación. Ahora valoran y aprecian esta capacitación porque les es útil", comenta Óscar sobre su experiencia con los pescadores.
A lo largo de estos años han impartido cursos a más de 300 personas sobre náutica pesquera, pesca artesanal y modelos de comercialización. Conocimientos que, a su vez, ellos han adquirido de técnicos del Cetmar. Pero, ¿funcionan?, preguntamos. "Si, si... Antes no le interesaban pero, ahora, se ve un cambio muy importante y muy positivo", contesta Benjamín taxativo.
Por eso no ocultan su satisfacción. Dicen que los cusos están dando respuesta a los principales problemas de los pescadores; la conservación del pescado, su comercialización y conocimientos básicos de mecánica, primeros auxilios y supervivencia en el mar.
Luchar contra la emigración
Sin embargo, y a pesar de tesón y empeño en formarlos, son conscientes de la existencia de problemas graves. "Los jóvenes no le ven futuro a la pesca y se van a la ciudad. Es un sector muy vulnerable, pero estamos a tiempo de tratarlo", apunta Óscar al referirse a las alternativas a la pesca artesanal; la acuicultura y el turismo pesquero.
Con todo, no ocultan cierta desazón por el futuro en el sector, sobre todo, si no se continúa con la formación. Y, como en todo proyecto, el principal problema es económico. "Hay interés en continuar con la formación, pero hay problemas de financiación". Un obstáculo que, por el momento, no saben como salvar.
(Foto: Marcos Canosa)
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Que bueno es veros ya en terreno!!!!!!!
ResponderEliminarParece que todo va bien por ahí. Interesante reportaje sobre la emigración.
Un abrazo desde España.
Estrella
Qué curioso. En Galicia los jóvenes tampoco le ven futuro al campo o a la pesca y se van a la ciudad. No somos tan diferentes, al fin y al cabo.
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